El viajar ha sido mi pasión, y por algo que en verdad he sufrido es por los hoteles, el inconveniente ha sido encontrar los que se adaptan a mis condiciones especiales, las cuáles son por salud, mi alimentación es sin dulce, y sin sal, cero grasa de tipo animal, además fui criado como taoísta judío, el tipo de alimentación y mis costumbres son muy diferentes a la convencional.
Los hoteles que siempre busco son aquellos en los que se pueda cocinar, por lo que muchas veces terminaba no propiamente en hoteles sino en cabañas alquiladas. No obstante el mes pasado que viaje a San Andres, algunos lugareños tienen este tipo de hoteles, en los que son hoteles, pero parecen que fueran apartamentos.
Algunos vienen equipados, en sus cocinas, pero por mis costumbres siempre cargo mis ollas y el correspondiente menaje, porque no utilizamos cosas de otras personas, ni siquiera los tenedores de los restaurantes, ni sus platos, pedimos que nos sirvan en plásticos, o llevamos los propios.
Igualmente no usamos ni las sabanas, ni cobijas de los hoteles, ni toallas, llevamos las propias, entonces por todo esto, a veces es mejor, cuando tenemos parientes al destino en el que vamos a viajar ir a quedarnos en casa de nuestros hermanos espirituales.
Cuando encontré el hotel que les menciono, pues este fue creado precisamente pensando en personas como nosotros, o personas que tienen dietas especiales, y por la complejidad de lo que pueden comer, no asisten a restaurantes.